Espectaculares fiordos descubren un país repleto de patrimonio: Noruega
Los vikingos han dejado su huella en este país nórdico de obligada visita. Sus espectaculares formaciones de pasado glaciar en forma de fiordos transportan al viajero a un paraje de ensueño. Se trata de Noruega, que tiene varios sitios de extraordinaria belleza que integran el Patrimonio de la Humanidad
Los vikingos han dejado su huella en este país nórdico de obligada visita. Sus espectaculares formaciones de pasado glaciar en forma de fiordos transportan al viajero a un paraje de ensueño. Se trata de Noruega, que tiene varios sitios de extraordinaria belleza que integran el Patrimonio de la Humanidad
Noruega es sinónimo de calidad de vida. Está considerado como uno de los países más ricos del mundo y con los mejores índices de desarrollo humano. Pero además, este estado nórdico de lustroso pasado vikingo es de obligada visita para cualquier turista ávido de experimentar nuevas sensaciones. Cuenta con un excelente patrimonio natural, histórico y monumental. No en vano, siete sitios diseminados por su territorio integran el legado de Patrimonio de la Humanidad.
Sin duda, el principal reclamo de Noruega son sus espectaculares fiordos, impresionantes formaciones naturales que han sido esculpidas durante miles de años por los glaciares y que se pueden disfrutar bien de cerca en un crucero fluvial. El paisaje que ofrecen es demoledor: montañas, lagos, glaciares, ríos, cascadas, arboledas,... Los más conocidos son los fiordos de Geirangerfjord y el Nærøyfjord, dos de los tres más largos del mundo que están en la lista del Patrimonio de la Humanidad.
Oslo es la capital de Noruega. De entre su patrimonio monumental sobresale el Palacio Real (residencia del rey Harald), el parque de Vigeland con sus 212 esculturas, el Ayuntamiento, las populares pinturas de Edvard Munch o los trampolines de esquí de Holmenkollen. La mejor panorámica de la ciudad se obtiene desde la torre de Holmenkollen. El pasado de dominación vikinga ha dejado su rastro aquí en museos como el Lofotr, el Marítimo o el de los barcos vikingos, con originales drakkars. Otras galerías dignas de mención son el Centro Nobel de la Paz y el Centro del Holocausto. En el centro de Oslo el visitante también puede dirigirse hasta la fortaleza de Akershus.
Noruega no sólo es la capital. El país cuenta con excelentes zonas geográficas dignas de ser visitadas. Sin ir más lejos, el Bryggen, un antiguo barrio de mercaderes medieval del periodo hanseático en la ciudad de Bergen, es Patrimonio de la Humanidad. Otra urbe turística es Trondheim. Al sur del Círculo Polar Ártico se localiza el archipiélago de Vega, un grupo de decenas de islas protegido por la Unesco. Mientras, el Arco de Struve es una cadena de triangulaciones extendidas desde Hammerfest, al norte del país, hasta el mar Negro. En el antiguo pueblo minero Røros sus habitantes residen en medio de una zona declarada Patrimonio de la Humanidad. Otra de las maravillas de Noruega son sus hermosas iglesias de madera. En total hay 28, y de entre ellas llama la atención la de Urnes en Luster, Patrimonio de la Humanidad. Las pinturas rupestres de Alta también deslumbran a quien las visita.
Si hablamos de alojamiento en Noruega, Oslo es la mejor opción. La capital cuenta con más de 50 hoteles que se ajustan a cualquier presupuesto. El desayuno está incluido en la mayoría del precio medio de las habitaciones. De entre los más renombrados cabe destacar el Hotel Continental, el histórico Grand Hotel o el Radisson Blu Hotel Plaza, el más elevado del norte de Europa. Resulta recomendable reservar con antelación.