Los mejores hoteles de Nueva York
The Plaza y Waldorf Astoria ejemplifican el lujo y la elegancia en cuanto a hoteles se refiere en la ciudad de Nueva York. Pero junto a estos emblemáticos establecimientos de hospedaje, emergen otros de gran calidad como The Carlyle, The Ritz-Carlton, The Mark, The Lowell, el Four Seasons o The New York Palace. Sólo al alcance de los más pudientes...
The Plaza y Waldorf Astoria ejemplifican el lujo y la elegancia en cuanto a hoteles se refiere en la ciudad de Nueva York. Pero junto a estos emblemáticos establecimientos de hospedaje, emergen otros de gran calidad como The Carlyle, The Ritz-Carlton, The Mark, The Lowell, el Four Seasons o The New York Palace. Sólo al alcance de los más pudientes...
Aunque Nueva York sea la ciudad que nunca duerme, lo cierto es que tiene más hoteles que cualquier otra urbe del mundo. Pese a que las tarifas han descendido en los últimos años, por menos de 50 dólares el viajero no encontrará nada que no signifique compartir habitación. Pero si su presupuesto no admite duda, debe prepararse para disfrutar de una atención y una gama de servicios inigualable, con cuidado de mascotas y la más avanzada tecnología, tanto si viaja por placer como por negocios.
De entre los de super lujo, cabe destacar varios establecimientos. Discreto y elegante, The Carlyle ejemplifica la esencia de su barrio, Upper East Side. JFK o Marilyn Monroe apreciaron su intimidad. Porteros ataviados con guantes blancos acompañan al huésped a su habitación. Tiene las mejores habitaciones con vistas hacia Central Park.
En primera línea frente al pulmón verde de Manhattan, The Ritz-Carlton NY Central Park es, por ubicación, espacio y servicios, perfecto si se viaja con niños. De la misma cadena, The Ritz-Carlton NY Battery Park es todo un referente en el Financial District. Esta torre de cristal y ladrillo a orillas del río Hudson es frecuentada por altos directivos que aprecian el clasicisimo de los Ritz, pero exigen diseño y tecnología. Una limusina Bentley está a disposición del cliente para transportarlo adonde quiera.
A sólo una calle de The Carlyle, el hotel The Mark rivaliza en elegancia y calidad de servicio, pero su etiqueta es menos estricta y su atmósfera más distendida: 123 habitaciones y 57 suites muy acogedoras. Si el viajero opta por la intimidad, pero no le importa poder cruzarse con Madonna en el gimnasio, The Lowell es su hotel: exquisito y con sólo 47 suites, la mayoría con chimenea y algunas con terraza, y 21 deluxe rooms.
Pero si prefiere codearse con líderes políticos y altas personalidades, lo mejor pasa por alojarse en The Sherry-Netherland, de arquitectura italiana y esencia francesa en un clásico que se asoma a Central Park con 33 habitaciones y 32 suites.
Más antiguo es The Pierre, instalado en un bello edificio georgiano, las reminiscencias al pasado están presentes en los interiores, que recuerdan a los de un museo, y en el servicio impecable. De sus 201 habitaciones y suites, las mejores son las que miran a Central Park. La sofisticación europea reina también en el Hotel Plaza Athénee. De sus 150 habitaciones, 35 son suites con terraza.
Junto al Lincoln Center, se encuentra The Phillips Club, un hotel y club privado distinguido y cosmopolita, con 120 habitaciones y lujosos apartamentos para estancias prolongadas. Ultramoderno, megalujoso y multipremiado, las mayores fortunas del mundo se alojan en el Four Seasons Hotel NY, una moderna torre de 52 pisos. Mientras, el dueño de The New York Palace es el sultán de Brunei, lo que da buena idea de su opulencia.
Pero nadie duda de que The Plaza es el hotel más emblemático de la Gran Manzana. Su leyenda sólo es equiparable a la del Waldorf Astoria, que cuenta con más de un millar de habitaciones.