El clima complicará el comienzo de Super Bowl
Fanáticos desafían condiciones del tiempo y precios exorbitantes para acudir al más famoso evento deportivo de Estados Unidos
Fanáticos desafían condiciones del tiempo y precios exorbitantes para acudir al más famoso evento deportivo de Estados Unidos
Aunque las condiciones climáticas no son las más favorables y ha sido necesario cancelar muchos vuelos que estaban programados para llegar a Texas, a partir de este viernes inicia la cuenta regresiva para el encuentro deportivo más esperado en los Estados Unidos, el famoso Super Bowl, con grandes posibilidades de que siga nevando durante toda la semana.
Una tormenta de nieve y fuertes vientos que se produjeron este jueves, obligaron a las autoridades a cerrar escuelas y aplicar medidas especiales para controlar el tráfico en diversos sitios. Para el fin de semana se esperan caídas de nieve de unos 30 centímetros en algunos sectores y lluvias heladas en otros.
El estadio es una instalación completamente techada, por lo que los equipos y sus seguidores podrán disfrutar de una emocionante jornada. Las autoridades de la Liga Nacional de Futbol decidieron mantener la programación que paraliza a la nación, y es seguida por millones de personas tanto en Estados Unidos como en otros países.
Boletos a precios increíbles
Por otra parte, los boletos de entrada para este evento ya fueron vendidos en su mayoría, y los que se consiguen rondan la exorbitante cifra de 3.500 dólares, de acuerdo a la información suministrada por las empresas encargadas de las ventas. En el sitio Ticketcity.com los boletos se ofrecen a precios que van desde 2.200 a 7.260 dólares por persona, y en ese orden se publican boletos disponibles en otras páginas.
Se estima que en unas 100.000 personas y 5.000 representantes de la Liga y medios de comunicación, asistirán a la majestuosa instalación deportiva, cuyo valor actual es de 1.300 millones de dólares. Por la módica suma de 200 dólares por persona, otros 5.000 fanáticos tendrán que conformarse con las graderías externas con pantallas gigantes que los organizadores instalaron ante la demanda que superó todas las expectativas.