En las calles todo se tiñe de verde, se disfruta de la gastronomía típicamente irlandesa, de los desfiles y, desde luego, se beben miles de litros de cerveza...
Brujas, la Venecia del Norte, una ciudad amable con una vida apacible, donde se puede gozar de la belleza de sus casas, viejos edificios y el encanto de los canales que la caracterizan.